La atleta concordiense Teresita Briozzi deberá afrontar un calendario cargado de emociones y responsabilidades, es por eso que prácticamente no tuvo vacaciones, debido a que las grandes competencias comenzarán antes de tiempo.
Su primera escala será en el Campeonato Mundial de Paraatletismo, que se celebrará desde el viernes 17 al sábado 25 de mayo en Kobe (Japón). Cabe destacar que el World Paraathletics y LOC de Kobe anunciaron a principios de 2022 un acuerdo para que la competición no se celebrara ese año tras una petición de este último.
Briozzi tendrá una desafiante prueba por delante, ya que desde la organización esperan 1.300 atletas de 100 países participantes que buscarán demostrarle a Japón porqué el paraatletismo es el deporte más practicado a nivel mundial.
Por otro lado y tres meses más tarde, la deportista cambiará de continente para recalar en los Juegos Paralímpicos de París 2024, que se llevarán a cabo del miércoles 28 de agosto al domingo 8 de septiembre. A su vez, es importante recordar que como parte de un acuerdo formal entre el Comité Paralímpico Internacional y el Comité Olímpico Internacional, establecido en 2001, el ganador de la candidatura a los Juegos Olímpicos, también debe organizar los Juegos Paralímpicos.
Sin dudas dos pruebas de fuego para Teresita. Es por eso que UNO dialogó con la oriunda de Concordia y le consultó sobre la intensa preparación que viene realizando, sus objetivos y si se permite soñar con una medalla.
—¿Hace cuánto comenzaste a prepararte para esta nueva temporada?
—No tuve vacaciones por el tema de que este año los torneos empiezan antes nuevamente. En mayo, mi primera meta es el Campeonato Mundial de Para Atletismo en Kobe (Japón). Pero tengo que empezar a competir a principios de marzo y después, están los Juegos Paralímpicos de París.
—¿Cómo es la intensidad de los entrenamientos?
—Los tipos de entrenamientos que voy llevando son a conciencia y adecuados para lo que va a ser este año, en donde voy a competir en la prueba de 400 y 200 metros.
—Lo mental también juega un rol clave, ¿cómo venís trabajando ese aspecto?
—La parte psicológica juega un rol muy fuerte. Siempre quise dejar en claro que se vuelva algo normal de hablar. A su vez, seguimos trabajando de la misma manera. Me sigo manejando con el mismo psicólogo, que se llama Darío Palazzo y vamos a trabajar lo que son las metas a corto y largo plazo.
—La presión es inevitable en un deportista de alto rendimiento, ¿haz aprendido a manejarla?
—Creo que más allá de toda presión o nervios, el año pasado trabajé mucho para llegar a los a los Juegos Parapamericanos y el Mundial. Descubrí todo lo que tengo que hacer y siempre digo que no hay secretos, solamente trabajar en los diferentes puntos, ya que es fundamental. Después, al momento de competir, obviamente va a haber nervios. Pero no lo llamaría presión.
—Se te vienen grandes competencias por delante, ¿vas a priorizar alguna o todas tienen su valor?
—Las competencias más importantes son el Campeonato Mundial de Paraatletismo en Kobe (Japón) y los Juegos Paralímpicos de París. Pero también, empiezo a competir a nivel convencional, para llegar a un mayor rendimiento y tener un buen nivel competitivo al momento que me toque salir afuera.
—Más allá del alto nivel competitivo, ¿te permitís soñar con una medalla?
—Creo que todos van a una competencia buscando la medalla. Aunque el año pasado entendí que no siempre va a haber una, porque hay un muy buen nivel. Pero también hay que estar alegres por otras cosas, el recorrido, lo que hiciste y lograste. Hay que apreciar lo mínimo y saber que uno va mejorando el rendimiento de manera individual. La competencia va más allá de que haya otras personas. Siempre es uno contra uno. Obviamente, todos vamos por la medalla.
Diario UNO/Gerónimo Flores
