El presidente del Instituto Autárquico de Planeamiento y Vivienda (IAPV), Manuel Schönhals, dialogó en la mañana de este viernes con LT15 donde abarcó diferentes temáticas que alcanzan la construcción y distribución de viviendas en la provincia. Valoró la reactivación de obras y adelantó la posibilidad de crear créditos personales para la construcción como así también la modificación en criterios para entregar casas del Instituto.
“Conozco la realidad, he ido varias veces a Concordia. Estamos colaborando con el INVyTAM de ver algunas cuestiones inherentes, no solo a la emergencia habitacional sino también finalizar algunas obras que están inconclusas de hace muchísimo tiempo. Estamos complicados, el Estado nacional se ha retirado de la ejecución de viviendas y eso nos obliga a instrumentar nuevas formas de construir viviendas, y es lo que le hemos planteado al gobernador. Tenemos el desafío de terminar dos mil viviendas que quedaron inconclusas en la provincia, no son viviendas que están en cero por ciento de ejecución, hay algunas que están mu avanzadas pero no pueden ser habitadas, muchas no cuentan con la infraestructura básica de servicio, entonces tenemos que completarlas”, dijo Schönhals.
Sobre la realidad económica del Instituto y cómo esto impacta en la ejecución de obras, el titular contó: “Cuando recibimos el IAPV estábamos en una situación compleja donde parte del fondo del Fonavi se usaba para pagar sueldos y bancar el Instituto en su faz operativa. Hoy hemos podido cambiarlo, los fondos Fonavi los tenemos prácticamente libres para la ejecución de viviendas lo que nos permitió reactivar todas las obras que estaban neutralizadas, sin requerir del estado provincial. Era complejo porque nadie pagaba, el recupero aproximado era de 200 millones y los sueldos rondaban los 400, hoy esa relación cambió con un recupero de casi 500 millones acompañando por una mejora de los fondos del Fonavi que fue algo que hizo bien el estado nacional pese a retirarse porque descongeló el monto fijo”.
Por otro lado, habló respecto a nuevas formas de construir viviendas que permitan menores plazos o una mejora económica, como pueden ser las casas de madera. “Estamos intentando avanzar en los diferentes aspectos, queremos dar pasos firmes, encontrar empresas que tengan capacidad para construir viviendas de madera y, así, impulsar algún programa, pero sin las empresas no podremos porque las experiencias previas del IAPV han sido muy malas”.
En esa misma línea, señaló: “Estamos investigando diversas posibilidades para, en un plan de viviendas, tener una ejecución de obra más rápida y, a través de un circulo cerrado de construcción poder avanzar en resolver el déficit habitacional aunque somos muy conscientes de que el IAPV por sí solo no lo va a solucionar. Tengamos en cuenta que este déficit está en alrededor de 40 mil viviendas y la última gestión logró construir apenas 405, y el récord es de 2000 viviendas con un 95% de casas aportadas por el estado nacional, es decir que debemos modificar y buscar metodologías que nos permitan avanzar en reducción de costos, un plan que nos posibilite una mayor colaboración recíproca, viviendas que sean construidas con ingresos no que sea una carga para aquel que la tenga que pagar“.
Por otro lado, Schönhals mencionó la situación de cada uno de los beneficiarios para pagar las cuotas y que es algo que se tiene en cuenta sabiendo que a los planes de viviendas acceden personas que cobran desde un salario mínimo que está apenas por encima de los 260 mil pesos, hasta personas con ingresos de poco más de dos millones. “El escenario social es complejo con la diferencia de salarios. Nosotros damos viviendas de 58 millones, que se hacen en cuotas de 200 mil pesos aproximadamente sin importar el salario del beneficiario, entonces genera una injusticia enorme“.
Ante esto, afirmó que se está trabajando en “poder otorgar crear créditos individuales para la construcción, ampliación o terminación de vivienda con algún criterio que sea justo”.
“Los criterios de adjudicación de viviendas del IAPV están establecidos hace mucho y nosotros queremos cambiarlos, tener un registro único de beneficiarios que permita que la adjudicación sea lo mas justa y universal posible. La vivienda del IAPV tiene que estar ocupada por un grupo familiar sea una madre y sus hijos, un padre y sus hijos o una pareja y sus hijos. Esto es prioritario pero es cierto que hemos entregado viviendas a personas solteras pero estamos en un proceso de revisión de la situación. Hay un sinnúmero de deficiencias que a través del tiempo se han cometido y hoy pagamos las consecuencias“, afirmó el presidente del IAPV.
Finalmente habló sobre la situación en Concordia y una reactivación de las construcciones en trabajo en conjunto entre provincia y municipio: “El barrio Agua Patito forma parte del programa Reconstruir, que está dentro de las dos mil viviendas que contó el gobernador que encontramos sin ejecutar. Estamos colaborando con el INVyTAM para facilitar recursos y contactos para luego trabajar en conjunto y finalizar las viviendas. Hoy no hay ninguna vivienda que esté levantada en condiciones. El intendente ha presentado un proyecto para finalizar viviendas que nosotros acompañaremos”.