Desde hace un tiempo el sector maderero en la provincia atraviesa diversas dificultades. La principal hoy en día es la falta de materia prima debido a las constantes lluvias en la provincia de Corrientes, desde donde se abastece con rollizos a los aserraderos y fábricas entrerrianas.
La situación es preocupante, habida cuenta de que la merma en la actividad por falta de insumos podría afectar fuentes de trabajo en el rubro, integrado por más de un centenar de emprendimientos. Así lo confirmó a UNO Sergio Corso, integrante del Consejo Directivo de la Unión Industrial de Entre Ríos (UIER) y titular de una de las empresas madereras más importantes en la región, con sede en Federación, quien señaló: “Hoy el problema fundamental que tenemos es el factor climático, debido a que por las lluvias casi no tenemos acceso a la materia prima y estamos muy complicados. Estamos bastante desabastecidos y no podemos cumplir con el mercado interno, ya que hay mucha demanda; y para la exportación estamos atrasadísimos. Se está exportando rollo de pino y también ahora se comenzó con las pruebas para exportar el eucalipto, que no sé si será definitivo”.
Según explicó, el 80% de la materia prima proviene del sur de Corrientes, una zona azotada por las fuertes precipitaciones. “Allá en estos días estuvo lloviendo mucho. De ahí nos proveemos tanto con pino como eucalipto, aunque en la actualidad se complica un poquito más conseguir el pino. Nosotros hacemos lo imposible para traer madera de alguna forma. Estamos comprándola un poco más cara en algún monte en lugares accesibles”, indicó Corso, quien es referente de Maringa Maderas, que se dedica principalmente a la fabricación de pallets con los que se abastece al 80% de las grandes empresas de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba; y además hacen maderas de acomodación para el consolidado de buques y containers. En tanto, también exportan parte de su producción a Estados Unidos principalmente, y también a Taiwán y otros países.
“Estamos muy complicados con este fenómeno de El Niño. La verdad es que en estos últimos tiempos, en el sur de Corrientes ha llovido casi el doble de lo que llueve acá. En vez de sacar los volúmenes que necesitamos, sacamos lo que podemos y estamos cumpliendo a medias con eso”, lamentó.
Acerca de si esta situación puede afectar las fuentes de trabajo, analizó: “Seguramente si esto persiste, puede llegar a haber suspensiones y otras medidas, porque la verdad que al no tener materia prima es imposible trabajar. Ahora no estamos trabajando la semana completa. Es decir, a veces trabajamos tres, cuatro días. Tenemos dos líneas de aserraje y por ahí trabaja una sola, pero al personal hasta ahora no lo hemos suspendido ni nada porque también destinamos a los trabajadores a la planta, donde por ahí tenemos más mano de obra haciendo clasificaciones. Así que estamos rotando, tratando de mantener el personal y que no pierda tantas horas”.
Por otra parte, comentó que el sector viene perdiendo rentabilidad porque al haber escasez se encarecen los precios. Al respecto, subrayó: “Hay un poco más de necesidad y por supuesto que se está pagando más caro. De todas maneras, no se han movido tanto los valores, por los precios de la exportación. Sí se nos ha encarecido un poco la materia prima por la suba del combustible, el aumento de mano de obra y de otros insumos”.
Aumento de retenciones
Por otra parte, Corso hizo alusión al aumento de las retenciones a las economías regionales, establecida por el gobierno nacional, y refirió: “Estamos viviendo un momento de coyuntura, y nos preocupa este tema de la retención del 15%, pero vamos a ver si esto es transitorio”, dijo, y remarcó: “Esperamos que sea transitoria esta medida, porque la verdad que es casi la ganancia de la empresa”.
Con respecto a este tema, Mercedes Omeñuca, presidenta de la Asociación de Madereros y Afines de Corrientes (AMAC) y secretaria general de la Federación Argentina de la Industria de la Madera (FAIMA) señaló a Radio LT7: “Antes del DNU trabajábamos dentro de las economías regionales, y pagamos un 5%, que no es lo mismo que pagar un 15%, como lo hacemos ahora”.
En este marco, la dirigente mencionó cómo impacta en el sector forestoindustrial en la región el DNU impulsado por el presidente Javier Milei: “El 60% de las pymes de la región exporta, pero el volumen no es comparable al de una empresa grande, por lo tanto nos afecta mucho a las pymes. Incluso cuando lo que exportamos no tiene valor agregado, pero se da por una demanda del mercado, aunque haya habido una mejora en el tipo de cambio, también hubo aumentos en los costos. Nuestros costos de producción son del 80%”, aseguró.
Preocupación del gremio
La falta de materia prima también se viene dando, según indicaron desde la Unión Obreros y Empleados de la Industria Maderera de Concordia, ante “la desmesurada exportación de rollizos a distintos países europeos, perjudicando la industria del aserradero, ya que el diámetro que se exporta deja sin materia prima a los aserraderos de la zona”.
Hace dos meses expusieron esta problemática y advirtieron su inquietud ante esta situación, ya que la merma de trabajo en el mercado interno puede afectar la fuente laboral de unas 3.000 afiliados que prestan servicios en el sector.
Diario UNO