A comienzo de junio se hacía un anuncio desde el municipio de Concordia y con el paso de los días las opiniones fueron dispares. Se trata de la construcción de la red de ciclovía que unirá a distintos sectores de la ciudad. La obra prevé la construcción de 27 kilómetros de recorrido. Con varias cuadras ya en funcionamiento de la bicisenda comenzaron los reclamos por parte de los frentistas de domicilios que se ven afectados por el escaso espacio que ahora cuentan para estacionar los vehículos, ya que solamente quedó una mano con posibilidad de detener los vehículos.
A ciencia cierta son más negativas que a favor las opiniones de la bisicenda, que aparentemente llegó para quedarse pero que desde el Concejo Deliberante han manifestado la falta de tratamiento en el recinto, principalmente de la oposición. Las imágenes ya comienzan a ser repetitivas y se trata también de la falta de previsión, porque se ha podido observar atascamientos en el tránsito, por ejemplo cuando un camión repartidor se detiene en el único lateral autorizado y se complica por detrás el paso de un colectivo de línea. También se torna una verdadera odisea en los horarios pico de ingreso y egreso de los chicos en las escuelas. Sí, la ciclovía pasa por el frente de una escuela y ello genera un trastorno más al tránsito del ya habitual. Quizás hubiese sido más atinado eludir lugares de gran aglomeración de vehículos para evitar sumar complicaciones a las que ya existían.
Desde el municipio informaron que los trabajos comprenderán la demarcación horizontal y vertical, colocación de delineadores, tachas, cordón separador y reparación de faja de hormigón existente para la ejecución de ciclovías integradas a la calzada. Dependiendo del tramo considerado, las ciclovías tendrán características bidireccionales o unidireccionales. Además, su extensión permitirá conectar la costanera con La Bianca o con la bicisenda de ruta 4.
El termómetro del efecto bicisenda en la ciudad, además del que se escucha y el que se percibe en las redes sociales, también llegó al espacio del Concejo Deliberante. Recientemente, el edil de Juntos por el Cambio Felipe Sastre comentó en LT 15 Radio del Litoral que comenzaron a recibir quejas al respecto. “El problema que estamos viendo sobre el que hemos recibido quejas toda la semana con mucha intensidad viene de los vecinos que se encuentran de repente con la bicisenda en la puerta de su casa o incluso peatones que se han encontrado con la obra en curso y tienen muy poco conocimiento de cómo se van a instrumentar.
Dichas quejas han llegado al Concejo Deliberante y lamentablemente lo que tengo que informar es que no ha pasado por el Concejo, por lo tanto no hay marco normativo que dé claridad y transparencia, que regule y que pueda llevar un marco de certeza a una obra que es un avance muy importante para esta ciudad”, explicó el concejal. Para el edil fue llamativo que el proyecto no pasara por el ámbito del Concejo Deliberante y se buscara una aprobación. “Ha faltado capacitación a la gente, explicar cómo va a funcionar y que esto no quede simplemente en un aviso de inicio de la obra, sino que sea un plan integral y que todos los concordienses disfrutemos por igual de los beneficios de esta obra, pero con la información que es necesaria para hacer un cambio tan importante y rotundo para Concordia”, cerró.
Sin dudas que se trata de una obra que redundará en quienes disfrutan de la actividad física, como también aquellos que se desplazan en bicicleta a sus trabajos. Además, hoy por hoy es exponencial el crecimiento de quienes se han decidido volcar a la práctica del ciclismo, y eso se puede palpar con los innumerables grupos de entrenamientos que hay en la ciudad.
Ahora bien, habrá que esperar cuáles serán los pasos a seguir, que se ejecute una planificación y que no termine en un intento, como lo fue alguna vez la implementación de canteros centrales en la avenida Eva Perón, con alguna que otra rotonda improvisada y que solo duró un par de semanas.
Diario UNO